El concepto de autodeterminación o libre determinación es otro de los pilares en los que se asienta los derechos ciudadanos, hito normativo de convivencia y de libertades de los pueblos y de los ciudadanos, para lograr alcanzar como finalidad su autocontrol, sin presión de ninguna naturaleza, en el objetivo de decidir o conseguir por si mismo a partir de sus capacidades cognitivas y conductuales, algo planteado o buscado.
Concepto de libre albedrío o libre elección en doctrina filosófica es el reconocimiento en la que se sostienen que los humanos desde el punto de vista ético, tienen el poder de elegir y tomar sus propias decisiones con responsabilidad; en psicología, implica que la mente controla algunas de las acciones del cuerpo, algunas de las cuales son conscientes (en el recinto de escolar es imperativo crear los espacios y entornos académicos para alcanzar estos momentos pedagógicos, psicológicos y éticos).
Además se suma a esta afirmación, la libre determinación como: capacidad de una persona para decidir algo por sí misma. Los y las estudiantes en el proceso de enseñanza aprendizaje al interior del aula y fuera de ella como parte de la aplicación de sus aprendizajes, estarán en la capacidad como seres humanos en formación y desarrollo de sus capacidades cognitivas, lograr su autocontrol y con ello su capacidad de conciencia en su responsabilidad individual de sus aprendizajes.
La autodeterminación como concepto político se define de la siguiente manera: “Decisión de los pobladores de una unidad territorial acerca de su futuro estatuto”, y “derecho de los habitantes de un territorio nacional a decidir su independencia y régimen político sin recibir presión alguna del exterior”.
Estas definiciones y las anteriormente planteadas, expresan con claridad meridiana, que todo precepto o norma de carácter general, pueden y de hecho así deberían ser aplicadas en el salón de clase, como: método de aplicación de derechos, autogobierno, autocontrol y libre determinación, individual y colectivos, para que en los ciudadanos o estudiantes a partir de su aplicación práctica social permanente, se realicen los aprendizajes con conciencia de su responsabilidad individual estudiantil y social.
El Derecho de libre determinación, es un derecho humano y es reconocido internacionalmente como un derecho colectivo, cuya titularidad le corresponde a los ciudadanos con responsabilidad; y desde el punto de vista filosófico la libre determinación se deriva de la necesidad humana de hacer realidad sus aspiraciones y de la afirmación de la igualdad intrínseca de todo ser humano, regida por principios y de independencia. Siendo la Educación una necesidad humana y un derecho; los docentes deben realizar y ejecutar estas prácticas sociales y humanas como destrezas educacionales en el recinto escolar, como una necesidad humana y derecho colectivo de los y las estudiantes, lo que contribuiría a partir de los aprendizajes y prácticas inter aula, en las distintas áreas del conocimiento, a generar individuos con nuevos comportamientos, mejorados conceptos de vida y cultura, y, responsabilidades ciudadanas con la familia, la Nación y el Estado.
El concepto, definición y prácticas de auto conciencia, auto determinación o libre determinación, como derecho, en estricta esencia, debe ser vinculada a los aprendizajes y conocimientos individuales y colectivos y a la noción de independencia. La independencia dentro de las normas reglamentos y leyes educativas, que le concedan a los alumnos la capacidad individual de aplicar su libertad e independencia de procedimientos académicos y metodológicos en los ejercicios diarios de los aprendizajes, investigación, indagación de procesos, información, criterios, opiniones, valoraciones, informes, resoluciones, ponencias, apreciaciones, estimaciones, diálogos y comunicación de puntos de vista. Derecho para auto controlarse y auto conducirse. Conciencia de su necesidad, conciencia de su libertad., de sus límites y de sus derechos y obligaciones escolares individuales.
Esto permitirá en el estudiante que su actuación humana y estudiantil esté orientada por todo aquello que aparece como la mejor opción, desde las actividades recreativas hasta el empeño por mejorar su actividad académica intelectual y en el tiempo en el trabajo productivo con eficiencia, lo que incidirá directamente en el bienestar personal y familiar.
Por lo tanto, la autodeterminación en el aula y en los procesos de enseñanza aprendizajes, en términos generales podríamos definirlos como la acción (voluntad) del estudiante o del colectivo de trabajo o investigación, tienen, para resolver por si mismos con capacidad de acción y decisión sus aprendizajes y conclusiones estudiantiles (libertad de decidir y libertad de organizarse, libertad de expresión), guardando y respetando los parámetros, espacios, niveles y límites que el conocimiento científico y la ciencia demandan respecto de los aprendizajes que no están enmarcados en ellos, ni anarquía, ni desorden, ni caos académico.
La voluntad opera principalmente en dos sentidos: Voluntad espontánea, debido a la motivación y convencimiento de realizar ese algo, como salir a pasear con alguien, iniciar una afición o pasatiempo, organizar una reunión o asistir a un entrenamiento y la voluntad organizada (como aplicación de su libertad de elección y decisión), fundamental para el ser humano y los estudiantes en la aprehensión del conocimiento y los procesos metodológicos de los aprendizajes, pues lo dota de capacidad para llevar a cabo acciones contrarias a las tendencias inmediatas del momento y orientarse por los objetivos planificados. Sin voluntad no se pueden alcanzar objetivos, metas o aspiraciones educativas o instruccionales planificados. .
Jean Jacques Rousseau utiliza el concepto de “voluntad general” en el Contrato Social , el bien común; como la guía de actuación en cualquier sistema político (la política es la expresión de las ideas doctrinarias que forman parte de un ideal; al igual que la educación, son pensamientos que afirman en la superestructura el modo de producción imperante), exponen la voluntad como concepto fundamental para entender la toma de decisiones en democracia. La voluntad es la capacidad que tenemos los hombres y mujeres y nos mueve a hacer cosas de manera intencionada. Es la facultad que permite al ser humano gobernar sus actos, decidir con libertad y optar por un tipo de conducta determinada. La voluntad es el poder de elección con ayuda de la conciencia; la voluntad como ejercicio y práctica de la personalidad estudiantil en su autodeterminación, autocontrol y autoestima.
La autoestima es la consideración positiva o negativa de la propia persona, es la actitud valorativa hacia si mismo; es el respeto a sus cualidades, habilidades y conductas. Desde la perspectiva del desarrollo Psíquico, el niño (a), el alumno o alumna van interiorizando el trato que reciben de los adultos y de su entorno social o educativo, lo que incide directamente en los aprendizajes y comportamientos sociales. A partir de esta situación objetiva, van tomando conciencia de la forma que es percibido y tratado, lo que le permite elaborar una visión de si mismo, de su conducta y de su propia valía; se fortalece su personalidad. El hogar y el recinto escolar (la sala de clases) deben ser los sitios educativos – didácticos pedagógicos donde se produzcan con afecto, amistad, calidez, respeto y responsabilidad, las nuevas relaciones sociales de aprendizajes y comportamientos (comunicación, diálogo, y, acuerdos y compromisos colectivos a partir de las necesidades, requerimientos y reivindicaciones individuales).
Como derivación de estas opiniones manifiestas, observemos la definición que sostiene los autores del diccionario de Ciencias de la Educación sobre autodeterminación y autoestima: Castro y Kikuchi
Autodeterminación.- “Acción y capacidad para decidir por sí mismos asuntos propios en función de identidad e intereses. La autodeterminación implica ejercicio de dignidad”.
Autoestima.- “Actitud valorativa hacia sí mismo. Es imperativo en términos educativos garantizar la adecuada configuración de la autoestima por que ello avala la adecuada configuración de su personalidad y madurez Psicológica, trayendo como consecuencia repercusiones favorables en la actividad escolar, el rendimiento y las relaciones interpersonales”.
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